Impresiones de Sarabia

Manu Sarabia se sincera en El Correo sobre lo acontecido a nuestro CDL.


Siempre había pensado que mi vida futbolística se desarrollaría de principio a fin en Bilbao, pero cuando con 31 años se acabó mi etapa como jugador del Athletic, me tuve que plantear dónde ir. De las ofertas que me llegaron, elegí el C.D. Logroñés porque era el equipo que más cerca quedaba de Bilbao, porque lo entrenaba Jabo Irureta, que había sido compañero mío y demostró mucho interés por llevarme, y, además, porque el C.D. Logroñés era un club que caía simpático. Fui para dos años y, al final, me quedé tres temporadas. La tercera, prácticamente, me vi obligado a seguir: nuestra campaña había sido tan excepcional que todo el mundo me decía que tenía que quedarme un año más.

De mi etapa vivida en Logroño, en el plano personal, siempre he dicho que estoy enormemente agradecido por el calor, el cariño y el trato que recibí de Logroño y de toda La Rioja. Tuve la suerte de conocer a grandes personas, dentro y fuera del equipo, con las que hice una gran amistad. Personas que me ayudaron muchísimo para poder adaptarme a una situación nueva e inesperada para mí: solo, en otra ciudad, lejos de mi familia y mi casa. La amistad, en algunos casos, se ha ido apagando con el tiempo y la distancia. En otros, no sólo se mantiene, sino que ha aumentado.

En el plano profesional, tengo recuerdos maravillosos. Pude cumplir los dos objetivos que me fijé al llegar: demostrar que en mi cabeza y en mis botas todavía había mucho que ofrecer y volver a disfrutar con lo que ha sido, es y será mi pasión: el fútbol. Y puedo afirmar que dentro de mi carrera como futbolista fueron unos años inolvidables y muy bonitos. El ambiente era fantástico. La afición estaba orgullosa de su equipo porque corría, peleaba y, además, jugaba al fútbol de maravilla (¡Nos quedamos a dos puntos de jugar la UEFA!). Las bandas de música y las charangas se encargaban de amenizar los momentos previos, dentro y fuera del campo. Y, durante el partido, con su ánimo y el de la afición, corríamos más y jugábamos mejor.

Tengo constancia de que la excepcional afición del viejo y añorado 'Las Gaunas' me ha hecho un huequito en su corazón y su historia junto a sus grandes ídolos: Lasala, Amantegui, Belaza, Lotina, Pedro, Abadía, Setién... Y me siento enormemente orgulloso de formar parte de la historia del C.D. Logroñés.

A lo largo de estos últimos años estoy viviendo con perplejidad y tristeza lo que sucede con el club y cómo se va descomponiendo. Cómo los jugadores pasan penalidades con engaños, impagos y encierros. Y no me puedo explicar cómo se ha podido llegar a la situación actual: ¡Quién ha permitido o ha querido que se llegara a esta situación!

¿Dónde está el entusiasmo y la energía de esa gran afición? ¿Dónde, el orgullo de una Comunidad y de una ciudad que alardeaba, y con razón, de estar compitiendo con los mejores? ¿Quién se ha cargado todo eso?

Por todo ello, me resisto a aceptar que el esfuerzo de tanta gente: aficionados, dirigentes, empleados del club, utilleros, cuidadores del campo, masajistas, fisios, médicos, preparadores físicos, entrenadores y jugadores, a lo largo de 70 años, vaya a perderse. Y como dice el himno: ¡Aúpa, aúpa Logroñes! ... ¡Aúpa! Querer es poder.

En Tve1

Las sensaciones de Juande

Tras la desaparición deportiva del Club Deportivo Logroñés varios han sido los ex en transmitir sus sensaciones. Hoy el diario el Correo publica una carta abierta del actual técnico del Real Madrid: Juande Ramos.


Personalmente para mí supone un duro golpe la triste situación por la que está atravesando el Logroñés. Esta entidad me ofreció la posibilidad de dar el salto a la Segunda división y me brindó esa enorme satisfacción de contribuir al último ascenso del equipo a la máxima categoría. Ilusión.

Aunque ajeno a las vicisitudes y detalles de la situación que ha derivado en la posibilidad de desaparición de un club, no puedo valorar los problemas que vive el equipo, pero sí recordar lo injusta de esta coyuntura para una afición que recuerdo entrañable, con un estadio que gozaba con su equipo. Pensar ahora en la disolución como entidad del Logroñés supone un golpe emocional a pesar del tiempo transcurrido desde mi estancia en esa parte de España donde disfruté y donde conseguimos el objetivo del ascenso a Primera.

Fue una temporada complicada, el equipo venía del descenso de categoría y el volver a Primera división era el reto. Mi recuerdo hoy aquí también al presidente Marcos Eguizábal que confió en nosotros para devolver al equipo a Primera y mi enorme abrazo a todos aquellos aficionados que aquella tarde de mayo de 1996 en Toledo acompañaron al equipo en un partido que ganamos por 1-2 con goles de Manel y Simeón.

Un partido que supuso mi primera gran alegría como profesional del banquillo, aunque el mérito fue de la comunión entre la afición y un grupo de futbolistas ilusionados, profesionales y luchadores con un enorme poder de sacrificio y un sueño que fueron capaces de conseguir por sus propios méritos sobre el terreno de juego.

Con todos esos recuerdos en mi mente, quiero lanzar ahora mi humilde y sencillo mensaje de ánimo a una afición y a una ciudad que no merecen el sufrimiento de luchar por la supervivencia de una entidad histórica. Confiemos en la respuesta adecuada de quien corresponda y que no desaparezca un equipo histórico en el fútbol nacional y que se ha visto tan afectado por la crisis que acecha al fútbol desde su vertiente de sociedad anónima.

Y para terminar, mi apoyo y mi abrazo para la afición, directiva, futbolistas y cuerpo técnico del Club Deportivo Logroñes y a toda esa excelente tierra que es La Rioja.

Logroñ-end

Se acabó. Parecía cercano este momento, pero a la vez lejano, imposible. Pero llegó. Y en realidad a nadie le pilló por sorpresa. La semana había sido agitada, como la mayoría de las anteriores. El domingo transcurría con rumores de todo tipo. Se sabía la inexistencia de liquidez, pero se confiaba en un "milagro" en el último suspiro, como tantas otras veces. Como siempre. Los jugadores, cuerpo técnico, directivos del Balsamaiso, periodistas y aficionados se congregaron entorno al Municipal una hora antes del choque que enfrentaría al club con el Tedeón en Navarrete. Se esperaban soluciones de última hora. Un maletín con billetes. Pero nada. Mientras tanto los jugadores rivales y decenas de aficionados esperaban expectantes en el San Miguel. Llegó la hora. Y los jugadores del Logroñés decidieron leer un comunicado argumentando su decisión. Tampoco explicaron nada fuera de lo común. Sólo la realidad que era por todos conocida. Nada de acusaciones incendiarias. Al menos por el momento.

Las consecuencias según la normativa son claras. Expulsión de Tercera. Descenso de categoría (cuarto en ocho años por motivos extradeportivos ), e imposibilidad de ascender al menos en la próxima temporada. Pero parece que no será así. La lógica indica que el Logroñés dejará de existir como tal. El histórico con 69 años de vida dirá adiós a su andadura. Sin que nadie lo evite.

La verdad es que en este momento no puedo explicar lo que se siente. Es un palo muy duro, que costará asimilar. Se veía venir, pero no es lo mismo a que ocurra de verdad. Parecía que nuestro equipo le había cogido el gustillo a eso de realizar equilibrios en la cuerda que divide la tierra y el abismo. Era un experto en situaciones insostenibles, parecía coquetear con la muerte para luego hacerle un guiño de complicidad y seguir jugando. Jugando a su manera, como a él más le gustaba; al limite. Pero esa cuerda se tensó demasiado y ahora intimamos con el chico que viste de negro y usa una guadaña para sus fechorías. Parece que nuestro patrocinador para lo que resta de temporada no será Yingu Solar ni el calor y energía procecedentes de las placas solares del amigo, ni el super-concierto internacional de verano. Me duele pero será pastrana.

Hoy ha sido un día de despedidas, de sollozos, de lágrimas. Pero aunque no parezca real, la verdad es que también hay gente que está contenta de lo acontecido. Y mucho. Y eso es lo que más me enerva. Duele. Y duele por qué te das cuenta de que la gente ha usado y utilizado al Logroñés. Se ha olvidado lo que todo este club ha dado a la cuidad. Incluso dinero. Y lo poco que ha recibido. Por no decir nada. Una injusticia. De las miles que se cebaron con esta institución.

Políticos, empresarios, mentirosos, acaparadores. Todos se aprovecharon del Logroñés. Ahora saldrán hablando de su logroñesismo de toda la vida. Que vaya pena. Pobre Logroñés. Mientras preparan un nuevo proyecto con el que intentar sacar una fortuna. Así es la vida. El dinero lo es todo. Al menos para ellos. Elemento que el Logroñés nunca tuvo, y tantos disgustos le dio.

Pero en esta noche el asunto no da para más. Demasiado enfado e impotencia contenida. También, y sobretodo, tristeza. Ahora nos tocará escuchar palabrerías del calvo de los coches.
Más larvas que echar al cadáver. Al que ni siquiera dejarán descansar en paz una vez perecido. Todos sabemos desde pequeños que hay que respetar a los muertos.
Ya veremos si se cumple.

Gracias por todo Logroñés. Descanse en paz.

Acontinuación la rueda de prensa de la tarde de ayer. Es un video de larioja.com.


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El cambio sin cambio

Ayer se celebró la famosa junta de accionistas. Ningún cambio sustancial. Sólo que Sánchez es ahora Presidente a todos los efectos. Salvo un pequeño escollo, con (parece) rápida solución. Después de una buena comilona se citaron por la tarde los interesados en el Municipal para realizar la susodicha parafernalia. Ahí ambos despotricaron a gusto. Hortelano exculpándose. Diciendo que ha perdido más de cuatro millones de euros. Golpeando al PR por intento de asesinato al club. Prometiendo mucho y regalando nada.

Sánchez por su parte agradeció los "favores" de JHP al club y se limitó a decir que esto sigue para adelante. El lunes anunciará el famoso concierto (suena Shakira) y prometió que hoy haría efectivos los pagarés. Además anunció su nuevo organigrama y el próximo entrenador: Alejandro. También prometió nuevos jugadores a lo largo de la semana. Mucha palabrería pero pocos hechos. A lo largo del día de hoy todavía no se han resuelto el problema de los pagos.

El aficionado blanquirrojo ya no sabe que pensar. Se la intentan colar por cualquier rendija. Nadie quiere ser villano y todo el mundo un héroe. No hay grandeza en el derrumbe ni en los traidores. Esto es una pesadilla. Esta aventura no da para una novela. Es una mezcla de miserias. Sólo hay vanidosos enfermizos que se pelean por salir en la foto, aunque la foto les retrate cruelmente. Sólo nos queda oxigenarnos con el fútbol. Y ya parece que ni eso. Por qué díganme quién es el guapo que jugará el domingo. A lo mucho, algún cadete ilusionado.

Otra vez vuelven los fantasmas. Julio Jiménez ronda cualquier movimiento del club. Y su papel sigue siendo una incógnita. Vuelven las conspiraciones. Más espadas que fútbol. El balón se mezcla nuevamente con los despachos Y los goles con los reproches. Después de escuchar a ambos presidentes quejándose de la situación me entra la duda en la cabeza de por qué se meten en dónde no les llaman. Me sorprende el apego a los puestos, a los sillones de cuero. Estoy harto de ver a estos dirigentes contando lo mal que se vive en las alturas, pero que se niegan a abandonar el cargo. Empiezan en no cumplir la palabra dada y luego se hacen trampas hasta en los solitarios.

Culpan a los que le rodean, disparan hasta a los palmeros. Me pregunto si la vanidad compensa tanta erosión . Me resultaría absurdo continuar cuando la gente niega o duda. Lo triste es que quien pierde en este tiroteo es el de siempre, al que le toca encajar todos los golpes. Y sólo tiene un nombre. El Club Deportivo Logroñés.

No aguanto más

Pensaba que lo había visto todo. Que cualquier desgracia (deportivamente hablando) había pasado ya por mi corta historia. Para mi, y para el resto de aficionados blanquirrojos que aún quedan.
Pondría una mano en el fuego, incluso las dos, a que ningún equipo de fútbol ha pasado por una situación semejante a esta. Ni parecida en años luz. Ya no aguanto más. No se ha inventado modelo para este tipo de vejación. Nadie lo entiende, salvo los que lo vivimos desde dentro. No se puede explicar. De ninguna manera.

Mientras tanto Sánchez sigue poniéndose de puntillas para hacer pie en esta piscina del desastre.
Sigue insistiendo en continuar. En parchear lo imparcheable. En jugar sin entrenador, en fichar a "jugadores". En mentir. Acción que no acaba de dársele del todo bien. Parece intentarnos explicar el fuera de juego, pero es que los defensas ya se han ido hasta del campo. Hoy sale en el diario La Rioja que el actual presidente tuvo una oferta por parte de un empresario de Azpeitia, José Ignacio Aizpuru. El cual estaba dispuesto ha ingresar dinero para solventar la situación. Pero que él no la aceptó. Si alguien entiende esto, que nos lo explique al resto de los mortales.

No entiendo sus jugadas. No entiendo sus estrategias, ni buscando la versión más retorcida posible. El caso es que en menos de 24 horas el equipo "juega" su primer partido de la segunda vuelta. Ante el Naxara, y en una situación peor que la vivida en aquella dramática primera jornada. La mayoría de jugadores han ejercido su carta de libertad. Tan sólo ocho futbolístas están a disposición de Dios sabe quién. Ya que Raúl Llona ha dicho por activa y por pasiva que no se va a sentar en el banquillo. Quizá mañana sea el día definitivo, aunque no lo creo. La Preferente lleva varias semanas esperando con los brazos abiertos. Y quizá mañana nos reciba.

Año nuevo. ¿Vida nueva?

Llegó el 2009. Rápidamente. Sin avisar. La famosa "quita y espera" quedó congelada. Por supuesto no se pagó ni un sólo céntimo. Pero Sánchez afirma que ello no conlleva consecuencias. Aunque la realidad parece ser otra. Un aumento de la deuda en dos millones más de euros.

La entrada del nuevo año nos dejó un disgusto más. El adios de Edu. Buque insignia del equipo en los últimos tiempos. Voz cantante. Aunque terminó como cabeza de turco. Él se acabó llevando todos los palos. Injustamente. Y ha dicho basta. El mayor de los García León deja el equipo de la misma forma que ha hecho todo hasta ahora: con clase. Dando margen hasta el lunes, por si se juega el partido. O para que se busque a otro. Otro que parece no ser Llona. Edu abandonó el club de sus amores. Muchos años son los que ha estado en Logroño. Tanto de futbolista, como de técnico. Un señor con bastón y sombrero. Incluso con capa. Gracias por todo.

Mientras tanto Sánchez pasó la semana entre turrones y gulas. Seguramente gastándose su viruta en presentes. Pero nada de nada al club. Los jugadores ultiman las vacaciones en sus casas. Aunque son varios los que han dicho que no volverán. Las negociaciones ayer fueron intensas. Pero no parece que se solucionara nada. Los euros no llegan y el abismo de la Preferente llama a la puerta. Puede ser precisamente esta tarde cuando el Logroñés pierda la categoría y casi la vida en su partido en Arnedo. A las 16:30 horas. Precisamente a la misma hora en que Tele Cinco emitirá Misión Imposible II. Aunque si quieren ver toda la saga de una tacada tendrán que pasarse a esa misma hora por el Sendero. Ni Tom Cruise nos salva de esta.