Y llegó el mes. Octubre. Un mes en el que el futuro del Club Deportivo Logroñés se encuentra otra vez entre la espada y la pared. Una vez más, y es que las aguas del ebro nunca estan tranquilas, el Logroñés y sus servicio jurídicos llevan más de una decena de años trabajando a diario, sin descanso. En el décimo mes del año, el club tiene que hacer frente a la famosa "quita y espera". La cifra que se debe pagar ronda los 150.000 euros. Sánchez ha asegurado que la pagará. También lo confirmó cuando presentó el presupuesto del club ha principios de temporada. En esos 736.000 aproximadamente, no sólo iban los gastos de pago de las fichas sino que también contaba con estas deudas.
Hay que matizar que si no se paga este plazo, en este mes, sin ningún tipo de retardo más, el club estaría abocado de forma definitiva e irrevocable a la quiebra. Y por lo tanto a la desparición. Pero el aficionado logroñés no debe estar nervioso, ya que el actual gestor ha garantizado el pago. El problema viene si se mira la historia, y las promesas de los anteriores dirigentes. Ahí es cuando las piernas notan cierto tembleque. Y con razón.
1 comentario:
Pues aqui es donde el Logroñés juega sus verdaderos partidos. Si no soluciona esto, aunque subamos volveremos a bajar. Toda la vida igual
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