Los colores de Alonso

"Quiero seguir demostrando que soy el mejor del mundo" decía en el día de ayer Fernando. El día además que dejó de ser el asturiano de moda en detrimento de Samuel Sanchez, gracias a su gesta lograda en Pekín. Ayer era el día de Asturias, el día del descenso del Sella; el Nano debía haberse tomado una sidra detrás de otra para decir semejante perlita. Si es así, le perdono el chiste.

Con la misma tracción que la cadera de Metezlder, con la velocidad de Guti con tacones o tan fiable como un pase en largo de Diarra, así es el R28 de nuestro compatriota. Hace mucho tiempo que Alonso no sube al cajón de la gloria, cosa que si ha hecho su compañero de Box, el pequeño Nelson. Fernando ahora se dedica a crear atascos por los circuitos de Dios, recordando a los que crea mi abuela cuando va los martes con su Ford Ka a jugar a las cartas con sus amigas (con la "L" reglamentaria detrás) .Ha pasado de competir con los más grandes de la F1 , a luchar particularmente con los Sato, Fisichella y compañía. Me rio yo del calvo y de su alonsomanía. Hasta el coche de mi amigo Andujar en un tramo como el de Sotés, le dejaría atrás. Me apuesto con quien quiera a que si un día el del Safety se motiva y le pisa....le sacaría los colores a Ferni.

Hablando de colores. "Magic" se pensó que era el principe azul cuando enseñó con su Renault el camino del asilo a Schumi hace un par de añitos. Pero la temporada siguiente se volvió morado al merendarse un buen marrón en McLaren. Además el negro le ayudó a ello, bueno los negros, por que al padre también le gusta darse garbeos por el paddock más que a un niño un chupa-chups. Ya no pinta todo de color de rosa para él, que si no quiere quedarse otro año en blanco, deberá apostar fuerte por el rojo.